Adiós a Giuseppe Basile, uno de los grandes teóricos de la conservación y de la restauración del patrimonio cultural
Uno de los más grandes pensadores modernos en el campo de la conservación del patrimonio cultural se apagó el 30 de julio de 2013 a los 71 años; Giuseppe Basile, Pippo, para los que le conocían.
Historiador del arte, tuvo como maestros a Cesare Brandi y Giulio Carlo Argan y dedicó su vida “a curar las heridas” -como solía explicar con cariño- del patrimonio artístico italiano y del resto del mundo.
En el 1976 entró como funcionario en el Istituto Centrale per il Restauro de Roma y a partir de 1987 dirigió el servicio para las intervenciones sobre los bienes artísticos e históricos del ICR, hoy Istituto Superiore per la Conservazione ed il Restauro (ISCR). Desde allí coordinó algunas de las intervenciones de restauración más importante al mundo como las pinturas murales de Giotto y Cimabue de la basílica de San Francisco en Asís, desfigurada por el terremoto del 1997; la frágil Última Cena de Leonardo da Vinci, en la basílica milanesa de Santa Maria delle Grazie; o las pinturas de Giotto en la capilla de los Scrovegni en Padua.